Verónica Lucio Berrocal
Fotografías cortesía de Fundación Marso
Ciudad de México, a 6 de febrero de 2024. La Fundación Marso en colaboración con la Galería “La
Cometa” inauguraron la tarde de ayer, 5 de febrero, la exposición “Hilos a la
Tierra”, que reúne el trabajo de los artistas colombianos Ana González, Vanessa
Gómez y Nicolás Bonilla.
A través de más de 15 piezas curadas por la directora de la
Fundación Marso, Sofia Mariscal, esta muestra se plantea como un espacio de encuentro,
diálogo y reflexión, que explora las delgadas líneas que existen entre las categorías
del arte y la artesanía; a la vez que vinculan expresiones culturales de comunidades
originarias de Colombia con el basto telar de la expresión cultural contemporánea.
El textil y la cerámica son los puntos centrales de la exposición,
ambos nos llevan a reconocer la fuerza que está presente en cada una de las obras
y como éstas poseen un poder tanto político como cultural; es un tejido vivo
compuesto de conocimiento, símbolos y rituales que se extienden a todo el
mundo.
Cada artista tiene una forma única de plasmar en su
trabajo sus inquietudes, sus pasiones y la relación que descubren entre la tradición,
lo natural y el arte.
Por un lado, Ana González presenta una serie de fotografías
e ilustraciones sobre lona y seda destejidas, tituladas Verdes, que capturan diferentes
entornos naturales de su natal Colombia y denuncian el despojo, la ausencia y la
extracción de los recursos naturales, bajo un punto de vista que reivindica la belleza
como valor.
Vanessa Gómez, también expositora en esta muestra, construye
su trabajo en torno al tejido tradicional latinoamericano, comprendiendo éste
como un ejercicio de resistencia que se enfrenta a los ritmos de la vida actual.
En su obra encontramos diferentes tejidos hechos a partir de crin de caballo,
plumas, algodón, nylon, hilo y lana, que cobijan las profundas relaciones entre
los territorios y sus comunidades, así como la relación entre las personas y la
tecnología.
Asimismo, las piezas creadas por el ceramista Nicolás
Bonilla forman parte de un proyecto realizado por él desde hace aproximadamente
diez años, que explora el vínculo entre el tiempo, el arte y la ciencia, centrándose
en la geología. A partir de dicho proyecto ha creado una basta cantidad de
rocas, también nombradas monolitos, con arcilla obtenida de distintos ríos alrededor
del mundo y bajo técnicas que varían su forma de cocción y temperaturas.
El artista encuentra un significado especial en estos monolitos
y en el acto de repetirlos, dado a que han estado presentes a lo largo de la
historia y la cultura.
“Bueno, es una forma
que está presente en la vida de todos los humanos desde siempre, entonces me gusta
repetirla como un homenaje a esa forma, que pues, es una forma muy sencilla, pero
muy poderosa. […] El gesto de levantar una roca, ya está como un poder creador
muy poderoso de los humanos y me interesa mucho pensar en eso, hacerlo muchas veces
es pensar en todas esas personas que han tenido esa relación con la roca”, mencionó
el colombiano en entrevista.
Las obras de Bonilla llegaron a esta exposición por una alianza
formada por la Fundación Marso, la Galería “La Cometa” y la Galería colombiana “SGR”.
“Hilos a la tierra” continuará exponiéndose hasta el mes de marzo en la sede de la Fundación Marso, ubicada en Berlín 37, Juárez, en la alcaldía Cuauhtémoc, de la Ciudad de México.