Redacción / Morelia, Michoacán, a 29 de junio de 2021.- Después de año y medio de tomar lecciones de música y realizar videos a distancia, niñas y niños de la Banda comunitaria “K’eri Tinganio” de Tingambato, Michoacán, se reencontraron este lunes 28 de junio para volver a hacer música ante el público en el Centro Cultural Tinganio durante la visita de trabajo que la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, realiza a este estado.
La encargada de la política cultural del país destacó
que esta administración trabaja en el reconocimiento del talento que
hay en cada rincón del país, a través de Cultura
Comunitaria.
“Antes, la Secretaría de Cultura se perdía de la mayoría por unos cuantos, porque solamente hacía caso de lo que pasaba en la Ciudad de México o en la capital de un estado, pero en cada rincón de este país extraordinario hay una magnífica vida cultural, hay muchísimo talento. Ustedes son parte de un gran movimiento cultural que está sucediendo a nivel nacional… La revolución cultural está viva y está sonando como nunca”, comentó Frausto Guerrero.
La Banda comunitaria “K’eri
Tinganio”, bajo la dirección de la clarinetista Rocío Román, es uno de
los 16 Semilleros creativos -grupos permanentes de creación colectiva y
participación, cuyo objetivo
es la formación artística comunitaria de niñas, niños y jóvenes- que el
programa Cultura Comunitaria tiene en Michoacán, como en todas las
entidades del país.
Estos semilleros michoacanos, que
atienden a 320 niñas, niños y jóvenes, se ubican en los municipios de
Apatzingán, Cherán, Coalcomán de Vázquez Pallares, Jiquilpan, La Piedad,
Morelia, Paracho,
Pátzcuaro (Erongarícuaro y Tzintzuntzan), Tepalcatepec, Tingambato,
Tzitzio, Vista Hermosa y Zamora. De estos, ocho son de música y están
coordinados artística y pedagógicamente por el Sistema Nacional de
Fomento Musical (SNFM).
“Los semilleros son para la
Secretaría de Cultura el proyecto más importante. Si ustedes toman el
camino del arte, nada los va a vencer porque uno puede transformar su
realidad. Una emoción, una
intención, una palabra que no se puede decir, la pueden expresar a
través de la música. Ustedes ya pueden nombrar lo imposible porque ya
tomaron el camino del arte en sus manos”, afirmó la secretaria Alejandra
Frausto Guerrero.
En esta presentación, que se llevó a cabo siguiendo los protocolos para el cuidado de la salud, se contó con la participación de 50 niñas y niños y cuatro docentes de Tingambato, quienes compartieron cómo la práctica de la música les ha permitido proyectar sueños y anhelos de las nuevas generaciones de esta entidad y, a la par, revalorizar la cultura purépecha, cultivando valores como la disciplina, el trabajo en equipo y la visión comunitaria.
El repertorio musical se integró de sones abajeños compuestos por las y los maestros de la banda comunitaria como
No me olvides, de Pedro Alejo Zacarías; Me acordé de ti, de Juan Alejo Rubio;
J.A.Z, de José Alejo Zacarías, y Maestro de música, de Rocío Román; así como de obras sinfónicas multinivel como
Otoño, de Las cuatro estaciones, de Vivaldi, y el danzón Mariposa en la noche, de Mario Kuri Aldana.
“K’eri Tinganio” se convirtió en la banda musical más grande del estado y desde hace siete años se dedica a fortalecer y ponderar la identidad purépecha de la población mediante la interpretación de sones abajeños y pirékuas propias de la región, sin dejar a un lado el repertorio sinfónico.