Redacción.- Recién fue inaugurada la muestra
Estrategias para habitar este mundo, que estará disponible hasta el
28 de mayo. Por lo cual todavía hay tiempo para entrar en contacto con las
obras colocadas en el piso 7 de la Biblioteca Vasconcelos, en Ciudad de México.
Sobre ella nos hablaron Eunice Cuevas y
Eduardo Macchetto, artistas e integrantes del colectivo Cuerpos Suaves, que es
el organizador de la muestra, en la que participan 4 artistas y 2 colectivas.
Sus obras aluden a realidades individuales, al mismo tiempo en que reconocen
formas de resistencia y cuidado mutuo frente a un contexto de violencia.
Al respecto, Eduardo Macchetto compartió
que la expo fue colocada en el piso 7 porque es la zona que contiene materiales
referentes al género (teoría de género, feminista, etc) y es que las artistas
presentes son puras mujeres.
Además, Eduardo Macchetto mencionó que
el montaje de las obras juega con el espacio de la propia biblioteca, de manera
que se transformen los formatos tradiciones de exposición.
En ese sentido, Eunice Cuevas anotó que
se genera todo un recorrido: “primero nos encontramos en un lobby con tres
artistas, luego tenemos todo un pasillo y terminamos en el ventanal”. Anotó que además de las obras colocadas en el
piso 7, hay una instalación que cubre desde la planta baja hasta el séptimo
nivel.
En total se trata de 19 piezas, entre
las que se incluye textil, dibujo, fotografía, instalación y bordado. Sus
autoras son Anahí Galaviz, Dulce Eme, Ingrid Cota, Rocío González, la colectiva
Hilos y la colectiva Fuentes Rojas.
Respecto al trabajo de ellas, Eduardo Macchetto
refirió que Rocío González “trabaja mucho con la idea del cuerpo, presenta dos
estandartes que están en alguna lengua indígena de Chile dado que ella viene de
ese país; también dos fotografías relacionadas a la colonia, los cuerpos
hegemónicos y no hegemónicos”.
En el caso de Ingrid Cota, Macchetto
explicó que la artista trabaja con performance y ritualidad, lo cual implica
que en la exposición se presentan dos registros: “uno es un hilo de un
kilómetro que se enreda”, mientras que la otra es, anotó Eunice Cuevas, una
faja que alude al control que la feminidad ejerce sobre el cuerpo, “también hay
fotografías que muestran los performances que ella ha hecho con esos objetos”.
Luego está Dulce M, la cual trabaja una
técnica en la que envuelve al cuerpo en una tela para hacer un registro. “Ahí
está toda una idea sobre el cuerpo y cómo este deja huella, tiene un par de
piezas con códigos QR que llevan a la acción en que se generan las piezas”,
agregó Macchetto.
La colectiva Fuentes Rojas lo que hace
es bordar en espacios públicos pañuelos con los nombres de personas
desaparecidas, ya sea por víctimas de feminicidio o del crimen organizado. El
objetivo de estas obras está en recuperar la memoria de esas personas.
En cuanto a colectiva Hilos, se trata de
un proyecto nacido en Guadalajara, cuyas integrantes realizan tejidos de
grandes formatos “que representa la sangre de todas las víctimas de la
violencia de México, Chile y Argentina”, comentó Eunice Cuevas.