Martínez Sánchez, quien también es directora de la compañía teatral, decidió iniciarla con el deseo de seguir haciendo teatro con niñas, niños y jóvenes, luego de ser parte de un programa teatral dentro de la Secretaría de Educación de Durango. Estudiantes que pertenecieron a ese grupo querían continuar con la experiencia, por lo que ella inició Volando Teatro de forma autónoma.
“El nombre me gustó porque para mí hacer teatro es como echar a volar la imaginación y la creatividad. En realidad, estamos volando todos, dejamos volar lo que somos realmente y lo que estamos haciendo, creando y buscando”, recalca Dalia Judith, licenciada en Psicología.
El objetivo inicial era poder continuar con ellos y seguir generando aprendizaje, aparte de que pudieran ejercitarse y hacer el montaje de alguna puesta en escena o algún proyecto.
Dalia también es docente en una secundaria de la comunidad Los Charcos Mezquital, Durango. Es una zona indígena en donde imparte clases de Formación cívica y ética; Historia y Artes a 260 estudiantes.
Explica la maestra que antes de la emergencia sanitaria por COVID-19, la combinación de ambas actividades se le complicaba porque tenía que estar toda la semana fuera de la ciudad y solo los fines de semana eran para Volando Teatro, “ahora, por el confinamiento, trabajo con ellas y ellos a través de Zoom. Hacen lecturas, ejercicios de meditación, respiración y ejercicios físicos con la finalidad de mantenerlos activos, con ganas e interés”.
Explica la maestra que el trabajo que realiza tiene como base sus investigaciones, como la que dio pie a su trabajo de tesis, que llevó por título “Cómo el teatro ayuda a las personas en la autoestima y el desarrollo humano”.
“Hago mucho trabajo en equipo y les recalco que no están solos, hacemos actividades para que aprendan a conocerse, que tengan confianza para proponer y aportar”.
Precisa Dalia que esta manera de trabajar le ha dado frutos, como la obra Cuentos y distorsiones, donde sus estudiantes “echaron a volar su imaginación para aterrizarla en el papel”.
Otra obra que nace desde las inquietudes y necesidades de los jóvenes es ¿Algún problema?, donde se cuestiona a la sociedad, la hipocresía y el abuso de otras personas.
Volando Teatro tiene como compañía siete años; ha realizado alrededor de seis puestas en escena, compartiendo el escenario también con actores y actrices con trayectoria, de quienes han aprendido mucho de sus experiencias.
Entre las obras de teatro que han trabajado se encuentran: Romeo y Julieta en tiempos de crisis, El confesionario y Evocaciones dominicales desde la pecera, esta última es de lo más reciente. A finales del año pasado participaron con esta obra en la temporada de Teatro en Contingencia “Rosaura Revueltas” para su transmisión en redes sociales.