Ulises
Fonseca
Las
cuestiones ¿qué es ser hombre?, ¿qué son las masculinidades?, y ¿a qué desafíos
se enfrentan? fueron apenas la puerta de inicio para el “Círculo de reflexión
sobre las nuevas masculinidades”, una conferencia-taller ofrecida por el
especialista Joel Caro Molina, en el marco del Festival Primigenia, que
actualmente se desarrolla en diferentes sedes de la capital michoacana.
Esta
conferencia en específico tuvo lugar en las instalaciones de la Secretaría de
Cultura de Morelia (avenida Madero Poniente #398, Planta Alta), un lugar donde Caro
Molina dio una fluida y vasta exposición sobre conceptos como patriarcado,
feminismo, estereotipos de género y las consecuencias de éstos no solo para las
mujeres sino también para los varones, argumento que el ponente fundamentó con
datos sobre, por ejemplo, los suicidios entre varones: 8 de cada 10 casos.
Lo
anterior supone la necesidad de resignificar varias instituciones
socio-culturales, aunque Caro Molina expuso que las reacciones masculinas ante
la organización del feminismo van en dos vertientes: puede haber una reflexión
crítica para el cambio, o bien, una perpetuación del patriarcado reactivo.
Lamentablemente,
dijo, éste segundo es más frecuente y por ello hizo énfasis en que “el feminismo
no es una guerra contra los hombres, de hecho, el estudiar y entender la
condición de los hombres ha sido un imperativo planteado por el feminismo”.
Asimismo,
Caro Molina hizo una descripción detallada de lo que es e implica la masculinidad
hegemónica: un modelo de hombría autoritaria y regenerativa, donde hay discapacidad
emocional, hipersexualidad y dominio del espacio público.
Aunado
a lo anterior viene el ejercicio de la violencia por parte de los hombres, que se
da en tres ámbitos: contra sí mismos, contra otros hombres y contra mujeres y
niños. Junto a esto vienen los costos del machismo: cargas enormes respecto a
éxito, poder, dureza, valor, rol de macho proveedor, falta de conciencia de
autocuidado, lo que conduce a la soledad y hacia un estado de salud endeble.
Se
trata de un modelo tan hegemónico, añadió, que ya hay voces desde las cuales se
asume que las causas son biológicas; sin embargo, Caro Molina discrepa de esta
visión y comenta que esta forma de masculinidad se debe a la socialización y
educación temprana: “a los hombres y mujeres se inculcan creencias,
estereotipos, roles diferenciados, roles en la escuela”.
Frente
a este panorama Caro Molina lanza la siguiente pregunta “¿por qué al no
cambio?, una posible respuesta es que se trata de algo que genera dolor –en los
hombres- al reconocer la forma en que concebimos y tratamos a las mujeres” y a sí
mismos. Por ello, hizo hincapié en la necesidad que hay de pensar en los
privilegios, en esta forma de masculinidad y en su deconstrucción.