Ulises Fonseca
Una
conferencia magistral con el historiador Carlos
Herrejón Peredo -del Colegio de Michoacán (Colmich)-, el montaje de una
exposición fotográfica y la reapertura
de su biblioteca, son algunas de las actividades y acciones realizadas en el
Museo Regional Michoacano “Dr. Nicolás
León Calderón” para celebrar 133 años de existencia.
En
efecto, el hecho de que tenga más de una
centuria de existir lo hace uno de los sitios museísticos más antiguos no solo
de Michoacán sino de todo el país -el sexto más antiguo-, mientras que fue
el primer recinto integrando al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
A
propósito de este aniversario, es que dentro del espacio habrá actividades que
se realizarán en un espacio renovado y ampliado, pues como refirió el director, Jaime Reyes Monroy, hubo
un proyecto parcial de restauración, con todo y museografía e iluminación nueva,
así como la reapertura de la biblioteca
del espacio, que estuvo cerrada al público una década.
Homenaje al hombre
de las tres ciudades
Como
refirió Reyes Monroy, este viernes el historiador Carlos Herrejón Peredo compartirá una conferencia sobre Antonio Arriaga
Ochoa, un personaje que, aunque resulte oscuro para el público no especializado
o adentrado en la historia, sí vale la pena recordar dada la importancia que
tuvo en la vida cultural estatal y nacional.
“Él
-relató el director- fue director de este museo en los años 30 del siglo pasado
y además es un personaje importante, porque luego fue director del Museo
Nacional de Historia y a él se debe que se hayan pintado la mayoría de murales
que están en el castillo de Chapultepec”.
Ahora
bien, al momento de estar al frente del Museo Regional Michoacano, Arriaga Ochoa
-tío del exgobernador Agustín Arriaga Rivera- enriqueció colecciones y la
biblioteca, también abrir espacio para la realización de murales, uno de los
cuales fue hecho por Alfredo Zalce.
Por
otra parte, el director expuso que esta semana fue abierta al público una
exposición temporal llamada “Verbena,
verbena jardín de matatena. Distracciones y esparcimiento en la primera mitad
del siglo XX”, que consiste, dijo “en una colección de 50 piezas en gran formato de la Fototeca nacional, con
la que también estamos re-abriendo nuestra sala de exposiciones temporales”.
Reyes
Monroy también comentó que, de ahora en adelante, en el museo tienen la
política de abrir foro a los artistas jóvenes formados en la Facultad Popular
de Bellas Artes (FPBA de la Universidad Michoacana) y el Conservatorio de las
Rosas.
El rescate de la biblioteca
La
biblioteca Antonio Arriaga, habilitada
para su consulta pública, estará plenamente abierta el siguiente 30 de enero,
día en que estudiantes, antropólogos, historiadores, arqueólogos, curadores, investigadores
y público curioso, tendrá acceso a un fondo bibliográfico mayor a los 7,000
libros.
Reyes
Monroy expuso que este corpus de libros se divide en tres: el fondo antiguo, con cerca de 500 libros publicados
en el siglo XIX; el fondo de principios
de siglo XX, que tiene 5,000 ejemplares, muchos de ellos donados por Antonio
Arriaga; mientras que el fondo moderno,
se compone por volúmenes de reciente edición, con 1800 piezas.
“También
hay que decir que se trata de una
biblioteca especializada en temas de antropología, historia, arqueología,
historia del arte, tenemos ediciones del INAH”, señaló Reyes Monroy.
Labores de restauración
De
acuerdo a Jaime Reyes Monroy, el día formal de reapertura del Museo Regional Michoacano “Dr. Nicolás León
Calderón” será este próximo 30 de enero, día en el que se hará informe de la
restauración parcial.
El
director señaló que ésta fue hecha entre
junio y diciembre del 2018 y requirió una inversión cercana a los 7
millones de pesos, fue por licitación y consistió, dijo, “en la instalación de aerodrenes para evitar
la humedad, fue colocado un domo nuevo
en el patio posterior con cristales para rayos UV, a fin de lograr la
conservación del mural ‘La lucha contra la guerra y el terror’, también se
cambió la iluminación general y museográfica”.
Aunado
a lo anterior, dijo, fueron intervenidos
la sala de exposiciones temporales y el auditorio, ambos con iluminación especiales
para la museografía -en el caso de la sala- y para los eventos -en el caso del
auditorio-. “Pareciera que siete millones son mucho dinero, pero en realidad
este tipo de edificios monumentales y antiguos requieren una restauración cara,
debido a que es necesario contratar mano de obra especializada (…) el beneficio
es mucho pero aún quedan pendientes, porque estos inmuebles son de atención constante”,
expuso Reyes Monroy.
La historia del
edificio
Jaime
Reyes Monroy no solo funge como director, sino que también es historiador y
conoce lo que sucedió en los días pasados del museo: “el edificio data de mediados del siglo XVIII y perteneció a un
personaje importante de la entonces Valladolid, que fue Isidro Huarte, uno
de los hombres más ricos de entonces y con mucha influencia política, fue
suegro de Agustín de Iturbide”.
“El
edificio -añadió- ha tenido diferentes etapas, ya que luego de la independencia
fue convertido por el gobierno del estado en colegio de niñas, el museo se
instaló aquí en 1915 aunque tiene su origen en 1886, cuando Nicolás León lo
creó entonces como ‘Gabinete de historia natural’ en el Colegio de San Nicolás,
éste fue creciendo y se le dio un espacio más grande, llegando entonces a este
edificio, adquiriendo el nombre de ‘Museo michoacano’”.
La
evolución del lugar prosiguió camino e incluso por un par de años compartió
espacio con la rectoría de la Universidad Michoacana, entre 1934 y 1936; luego
llegó Antonio Arriaga Ochoa.