Ulises Fonseca
“¿Cómo
lo escuchas?”, preguntó en el intermedio un asistente a otro individuo que también
acudió al más reciente concierto de la Orquesta
Sinfónica de Michoacán (OSIDEM), un recital realizado en el teatro Morelos
que fue especial, dado que implicó la presentación de Román Revueltas Retes, el nuevo director.
“Pues
me ha gustado”, comentó el sujeto interpelado, a lo que el primero respondió
“por lo menos no están desafinados como otras veces, yo la neta ya ni venía a
escucharlos, es más, ¿sabes cómo me los imagino?, como en la película de
Fellini” dijo en referencia a “Ensayo de
orquesta”, una sátira los sindicatos y a la política.
Lo que sí es de destacar es la interpretación de valses, polcas y marchas, al cabo de las cuales impulsó que la mayor parte del público ovacionara el concierto, en reconocimiento al desempeño de los músicos.
Pero
no todos estuvieron en la sintonía de alabar el trabajo de los músicos: al
preguntar directamente a otro de los asistentes, un hombre joven que respondió
con desenfado “no me provocó grandes cosas, digo no me aburrió pero sí fue un
poco gris, los músicos estaban ahí haciendo las cosas mecánicamente, como
equis, es mejor la Sinfónica de Xalapa”.
¿Qué
hubo en el concierto que generó entusiasmo en algunos y apatía en otros?, fue
un programa que incluyó lo siguiente: “Marcha florentina”, de Julius Fučík; “La
bella durmiente”, de Piotr Ilych Tchaikovski; “Jesusita en Chihuahua”, una polka de Quirino Mendoza y Cortés; “Las
bicicletas”, de Salvador Morlet; “Unter Donner und Blitz”, de Johann Strauss;
la “Marcha de Zacatecas”, de Genaro Codina, entre varias otras.
Por
último, cabe destacar que luego de un proceso de selección abierto, de carácter
nacional e internacional en el cual participaron 32 postulantes, Román
Revueltas fue elegido como director de la OSIDEM, una agrupación oficial que
operó acéfala dos años.