Redacción
Con el tema de las redes y la organización, fue que los días 30 de noviembre 1 y 2 de diciembre se realizó el
segundo encuentro nacional de Colectivos Culturales Comunitarios en la Ciudad de México (CDMX), evento en el que
Michoacán estuvo representado a través de Red Lab Laboratorio de Gestión y Vinculación Cultural.
Se trató de un evento donde convergieron gestores culturales de diferentes estados del país, para intercambiar experiencias, ampliar redes de colaboración mutua y contribuir así al desarrollo social desde la cultura, pues como bien dijo el promotor de iniciativas como el Faro de Oriente y actual director de cultura comunitaria en Tlalpan (CDMX),
Benjamín González, “lo que hacemos es colocar en los nervios más sensibles de la sociedad: los puntos neurálgicos, que en conjunto pueden hacer la diferencia”.
La suma de experiencias ha crecido de manera paulatina, pues como afirmó el
jefe de la Unidad departamental de Cultura Comunitaria de la delegación Tlalpan, Mariano Mendoza Ramos, señaló que el encuentro inició en los colectivos de Tlalpan que han logrado consolidarse, para a partir de ahí, compartir experiencias con agrupaciones de otras delegaciones capitalinas y de diferentes estados de la república
“la idea es crear un mapeo general para localizar los puntos donde se encuentran estas ‘mini resistencias’ de la cultura comunitaria”, expresó.
Por tanto hubo tres formas de participación e intercambio de ideas:
foros, conferencias, conversatorios en torno a la labor que realizan los colectivos y los laboratorios, éste último, explicó Mendoza Ramos “lo que se realizó fue que los participantes del encuentro fueron a la comunidad o sitio en el que las agrupaciones culturales trabajan, para ver lo que hacen”.
Con esas modalidades de intercambio y diálogo es que participaron colectivos culturales de
Michoacán Hidalgo, San Luis Potosí, Puebla y Morelos; mientras que de las delegaciones capitalinas estuvieron
Azcapotzalco, Iztapalapa y Coyoacán.
El gestor añadió que realizar un encuentro nacional tiene relevancia en tanto que es necesario “la formación y consolidación de redes, para el siguiente año sí se piensa en un tercer encuentro ahora con el propósito de avanzar en materia de consolidación de esta red”.
A esta cuestión se podría añadir lo mencionado por Benjamín González, en el sentido de que es necesario contribuir a mejorar el contexto social de inequidad que tenemos hoy mediante un factor de desarrollo como lo es la cultura, mismo que dijo “nos permite tener mayor capacidad de discernimiento, de empatía, mayor conocimiento y capacidad para tomar decisiones y de alguna manera, nos proyecta para tener una sociedad mucho más justa que la que vivimos (…) en esta tragedia nacional lo que hacemos es esperanza y encontrarnos también es esperanzador”.
Ejemplo de trabajo comunitario
Mariano Mendoza Ramos expuso que en Tlalpan, la labor que realizan para fortalecer la cultura comunitaria se sostiene a partir de tres pilares: “el primero es el trabajo con promotores culturales comunitarios, hay 51 compañeros que están en las cinco zonas territoriales de la delegación, ellos dan tres servicios: ‘libro-club infantil’, ‘cineclubes’ e ‘Itacates a las calles’, éste último es como un híbrido.
El segundo es un programa de talleristas, hay 130 personas especializadas en diversas disciplinas artísticas y lo que hacen es estar en los centros comunitarios para dar, a la comunidad, una introducción a alguna disciplina.
El tercero es un programa de colectivos culturales comunitarios, para éste se lanza una convocatoria en la que apelamos a que la gente haga su proyecto, decida en que tiempo y donde para que sea un proyecto totalmente ciudadano, es decir que ellos hacen las actividades, ven la agenda y hacen los diagnósticos participativos; lo que hace la delegación es brindarles un apoyo económico para que puedan fortalecerse”.