Redacción / Ciudad de México a 17 de febrero de 2021.- Alejandro Franco fundó en 2013 la compañía Locomoción Laboratorio de Investigación y Creación Escénica, en la Ciudad de México, con el objetivo de crear proyectos multidisciplinarios y acercar los procesos artísticos a diferentes públicos.
A finales de ese mismo año, decidió trasladar y establecer la agrupación en Tecomán, Colima, debido a que “pensamos que era un buen lugar para generar un cambio a partir del arte”, expresa en entrevista Franco.
A
partir de entonces, la compañía, conformada por ocho jóvenes artistas,
se dedica a elaborar proyectos que exploran las artes escénicas,
plásticas y visuales, porque “consideramos que
son un arte integral que tiene cabida para cualquier cosa, son un medio
de expresión que puede ser un potenciador inmenso”, comenta.
Fue en 2017 que presentaron su primera obra
Tic, tac, clown, la cual integra las disciplinas de fonomímica, danza contemporánea y, como su nombre lo indica,
clown.
A
la fecha, cuentan cerca de 20 montajes escénicos distintos; de igual
manera, presentan recitales de danza y teatro con diferentes temáticas:
historia del rock, mujeres relevantes en la
música y comedia musical, por mencionar algunos.
Entre su repertorio se encuentran la obra de teatro
Circo para bobos, que aborda el tópico de la búsqueda de la
felicidad y con la cual ganaron una mención honorifica en la Muestra
Estatal de Teatro de Colima 2019; así como la puesta en escena de
Sin rumbo, compuesta por cuatro historias trágicas inspiradas en el realismo mágico.
Destaca las videodanzas
Limbo, diálogos del cuerpo y el espacio, que trata sobre “los vacíos emocionales y personales que se generan a partir del confinamiento por la contingencia sanitaria”; y
Dos sangres, cuyo eje temático es la multiculturalidad y “cómo
podemos abrazar distintas culturas siempre dándole el espacio a cada
una”; ambas presentadas de manera virtual durante la contingencia
sanitaria.
La
agrupación también se interesa en abordar temáticas como la violencia
de género, el rescate de espacios públicos, el cuidado del medio
ambiente, “que consideramos pertinentes para nuestro
contexto social, político y territorial. Con ellos nos interesa alzar
la voz, generar consciencia sobre lo que pasa a nuestro alrededor y
crear un cambio, en nuestro caso, a partir del arte”.
Respecto
a la forma en la que crean nuevas propuestas escénicas, Alejandro
Franco comenta que consiste en “investigar los procesos, conocer sus
estructuras y fragmentarlas para construir
nuevas; por ejemplo, hacemos talleres con un especialista y nosotros
tratamos de construir algo a partir de ahí”.
Además
de dedicarse a la producción de obras, también imparten talleres a
niñas, niños, jóvenes y adultos, sobre teatro y danza; y se dedican a
organizar festivales artísticos con el propósito
de “distribuir el conocimiento y fomentar las artes escénicas en
nuestra comunidad”.
Ante
la emergencia sanitaria, la compañía se ha mantenido activa a través de
formatos virtuales, tomando cursos, presentando sus trabajos y
“explorando nuevas posibilidades de creación
y construcción; para nosotros ha sido bien importante, como artistas y
seres en resiliencia, adaptarnos y no clavarnos en lo que no podemos
hacer, sino en lo nuevo que podemos generar a partir de estas
experiencias”, expone Franco.
Actualmente,
entre sus nuevos proyectos se encuentra una colaboración con el artista
Hiram Castillo, para realizar una serie de fotografías con el tema de
urbanidad y soledad, las cuales,
cuando las condiciones sanitarias lo permitan, presentarán en una
exposición.
Para conocer más sobre el trabajo de la compañía, puede consultar sus redes sociales, Facebook: /locomocionlab, e Instagram: Locomocionlab.