En el marco del Mes del Orgullo y el Día Internacional LGBT+, la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, a través del Fideicomiso para la Promoción y Desarrollo del Cine Mexicano en la Ciudad de México (PROCINECDMX) proyectaron la película Finlandia del director Horacio Alcalá en función especial como parte de los ciclos de exhibiciones que se realizarán mensualmente en la Biblioteca de México.
El Patio Central “Octavio Paz” fue sala de proyección, donde el público de todas las edades se dio cita para disfrutar de la cinta española-mexicana, ganadora de seis premios internacionales y nominada en tres categorías a los Premios Ariel en su 65ª edición: Mejor actor, mejor maquillaje y mejor vestuario.
La
película invita a reflexionar sobre temas tabú, de inclusión y diversidad
sexual. Retrata las pasiones, traumas y sentimientos encarnados en sus
protagonistas: Delirio (Noé Hernández), Amaranta (Cuauthli Jiménez) y Mariano
(Erick Israel Consuelo). La historia se entrelaza a través de la añoranza y
nostalgia del gran amor de Delirio, que partió a Finlandia; ella será la líder
que guíe a la comunidad al descubrimiento de sí mismos.
El
evento se vistió de gala y colores con la presencia de Cuautli Jiménez, actor
tabasqueño nominado como “Mejor Actor” al Ariel, por su interpretación en el
papel de Amaranta y Xaneri Merino Damián, hablante de la lengua indígena tu’un
savi, tejedora del telar de cintura y modelo de prendas tradicionales
originarias. Ambos, presentaron la galardonada película, destacando los
detonadores que aborda sobre la comunidad istmeña, entre estos; los mitos y
realidades de la muxeidad, el trabajo artesanal y plagio de diseños de
textiles, situación que atraviesan los artesanos, tejedoras, costureras y
diseñadores de Oaxaca.
Al terminar el filme, se realizó un diálogo con los invitados, en el que compartieron con los asistentes su experiencia y aprendizaje al documentar a esta comunidad, así como elementos y simbolismos de la película, como la representación del “Muro de los lamentos”, donde los personajes tienen una especie de catarsis a partir de las problemáticas que enfrentan cada una, que se conecta con el terremoto, la energía del desamor, la libertad, la transición y el quiebre de vida de sus protagonistas. Este es el primer largometraje de ficción que realiza el documentalista, en el que también retoma su interés por el mundo de la moda.