“Es posible renunciar al canon”
Ulises Fonseca Madrigal
Las posibilidades creativas que ofrece la edición independiente, tanto en la cuestión de los formatos como en soportes, contenidos, presentación y distribución, así como la relación de esto con las nuevas formas de pensamiento, fueron las líneas que dieron soporte a las dos primeras mesas de diálogo del Traspatio, realizadas este jueves en el Centro Cultural UNAM.
La imaginación y los libros
Si bien el formato convencional con que se ha realizado el libro funciona todavía para muchos proyectos, lo cierto es que existen diferentes formas de jugar tanto con la presentación física como con el contenido de estos objetos, cuestión desarrollada en la mesa “Nuevas formas de edición”.
En esta mesa, una expectante Mara Rahab Bautista, coordinadora del evento, mencionó que debido a los cambios de agendas de los invitados, solo pudo haber la presencia del editor de Dragón Rojo, Fabricio Vanden Broeck, acompañado por la artista Ioulia Akhmadeeva.
Sin embargo, Vanden Broeck y Ahkmadeeva salieron al quite para hablar sobre cuestiones relacionadas con el libro digital y la ruptura de paradigmas. En ese sentido, para el primero de los ponentes, ahora el libro no es sólo un soporte de textos “para abrirse a otras posibilidades… la perspectiva del futuro la veo muy promisoria”, dijo.
En efecto, Vanden Broeck afirmó que los libros de artista fueron precursores, si bien “hace falta explorar formatos, romper con la secuencialidad lineal y experimentar otras lógicas”; en esta cuestión es especialista Ioulia Ahkmadeeva, quien afirmó que en efecto, se puede ver una tendencia en la que hay cambios de forma y diseños más atrevidos, “se abre mucho los formatos, las formas, los conceptos”, la evolución implica ruptura de esquemas, dijo
La charla picó la atención de los editores presentes al grado de que María Cristina Pérez Reyes (Editorial Chuen) y Tonatiuh Trejo (C`est un livre) decidieron unirse a la mesa a compartir sus propias experiencias en el campo.
En ese sentido, Trejo reiteró la necesidad de ampliar formatos, “si podemos trastocarlos y contaminar a los autores para generar otras formas de creación, podría haber distintas maneras de lectura y editorialidad”; mientras que Cristina Pérez Reyes consideró que “ni lo digital ni el libro de papel acabarán, cada uno tiene sus propias narrativas, que conviven”.
La actualidad
“El libro, espacio para el pensamiento contemporáneo” fue el nombre de la segunda mesa, hecha por Rodrigo Téllez de parte de Tigre Ediciones y Tonatiuh Trejo, quien es parte de C`est un livre. Éste último tuvo la mayor participación en el espacio, donde enlazó el trabajo que hace la editorial con las nuevas formas de trabajo “los proyectos que hemos sacado a la luz tienen una mecánica propia, nuestra primicia es que el pensamiento contemporáneo no tiene una forma única y cada contenido posee un formato particular”.
En efecto, afirmó que la evolución del pensamiento puede cuajar en lo editorial, tanto en el juego de las formas de presentación como con la maquetación y distribución, “el modelo ordinario funciona para un tipo de proyectos, pero es posible renunciar al canon”, dijo.