Ulises Fonseca
Aunque es algo muy asociado al cine y a la actualidad, la espectacularidad de los efectos especiales es en realidad algo que viene de centurias pasadas, puesto que eran un elemento importante en la
“Comedia de magia”, un género teatral que data del siglo XVIII. De hecho, este es el tema de estudio de un
curso iniciado este lunes en la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) de la UNAM campus Morelia.
Para hablar más al respecto, el profesor español que fue invitado por la ENES para dar el curso,
Fernando Domenech, expuso en entrevista que la “Comedia de magia” fue un género espectacular “que basa la mayor parte de sus efectos especiales en las metamorfosis y vuelos que hace un duende, una maga o un mago y esto implicaba la transformación de todo el espacio escénico”.
Por tanto,
el carácter de esta forma de teatro no era satírico ni irónico, sino algo festivo y sin mayor pretensión que incitar a la diversión, aunque eso sí, había una especie de pre-feminismo, pues como dijo Domenech
“en el siglo XVIII la mujer tenía un papel bastante secundario, es verdad que las nobles podían tener un papel protagonista pero las demás no, pero el personaje de la maga, que nunca era noble, sí podía hacer un montón de cosas, ahí puede haber algo de reivindicación femenina”.
Además, el profesor mencionó que nuestro país sí fue un campo fértil para la Comedia de magia, sin embargo “hay mucho trabajo por hacer para estudiar este tipo de obras en México, hay documentos que nos hablan de la forma en que se representaban obras básicas del repertorio español”.
Ahora bien, Domenech señaló que en el curso que imparte,
los estudiantes revisarán los aspectos históricos y artísticos del género, con miras a que después trabajen con profesionales del teatro “para crear algún tipo de obra actual, que tenga algo de aquella comedia”. Por lo pronto, el curso actual se realiza de 4 a 7 de la tarde en el aula magna de la ENES Morelia, donde estará hasta el 22 de febrero siguiente.
Auge y caída
De acuerdo a Domenech,
el momento de esplendor de este género teatral “fue en el siglo XVIII, en toda Europa y sobretodo en España, aunque también he visto que en México”. Asimismo, para despejar confusiones, el académico externó que se trata de algo diferente a la comedia del arte:
“Comedia del arte es el nombre al estilo de los italianos, desde que nace el teatro moderno, es decir hacia el siglo XVI, surge un modo de representación que sólo ellos podían hacer y por tanto es una forma de trabajo muy distinta a la comedia española donde la improvisación era muy escasa”.
Se trata de una forma de expresión que pervivió con mucha fuerza hasta el siglo XIX, pero al entrar el XX cayó en el olvido debido a que, dijo el académico, “los alardes escenográficos ya no le interesaban a la gente de teatro”, a lo que se añade el interés creciente que se tuvo por el cine, que fue el que recogió la tradición de los efectos especiales.