Ulises Fonseca
“Divisadero” y “Bankilal” fueron considerados por el jurado como los mejores trabajos de la sección de competencia en el 12º Festival de Cine y Video Indígena, mismo que tuvo su clausura la noche del viernes en el Centro Cultural Clavijero (CCC).
Cabe decir que ambos realizadores obtuvieron la cantidad de 12 mil 500 pesos, más piezas artesanales donadas por el Instituto del Artesano Michoacano y la Secretaría de Pueblos Indígenas (SPI). Además, quienes calificaron como jurado fueron Jorge Amós Martínez Ayala, Vladimir Aburto y Adrián González Camargo.
De hecho, en su momento arriba del escenario que sirvió como protocolo, Amós Martínez Ayala añadió que en esos trabajos pudieron ver “que no hay idealización folklorizante, sino una representación compleja de los pueblos indígenas (...) le pediría a los videoastas dejar atrás el folklore para adentrarse en las problemáticas de las comunidades”.
El primer trabajo en mención fue realizado por Randall Gingrich, quien luego de recibir el reconocimiento mencionó en su particular español, que el hacer “Divisadero” fue toda una “experiencia muy enriquecedora (…) al salir de aquí buscaré la manera de compartir estos trabajos”. Éste hombre, quien es originario de Estados Unidos pero que contrario a los seguidores de Trump siente fascinación y respeto por las culturas de México, recibió una guitarra y un gabán.
Por su parte, “Bankilal” fue realizado por María Dolores Arias, mujer tsotsil quien luego de obtener el reconocimiento sólo atinó a decir que “mi corazón está muy contento”, para luego obtener una reluciente pieza de cobre.
Cabe mencionar que de manera previa se ofreció una semblanza de la vida y obra de Ireneo Rojas, académico de origen purépecha a quien fue dedicada esta edición del Festival; en ese marco, también le fue entregado un reconocimiento a su viuda, Rocío Próspero.
Los otros trabajos en la sección de competencia fueron “Itsiri K´uinchekua”, hecho por Juan José Estrada Serafín; “Xanicha”, realizado por Maximiliano Valdés Lima; así como “Jucheeti ánchekorheta”, de Francisco Manuel Rodríguez Huacuz; los tres son alusivos al pueblo purépecha.
Al término de todo tocó la Orquesta Sonido de la Pacanda, misma que también recibió un reconocimiento especial desde la Unidad Regional Michoacán de Culturas Populares, perteneciente a la Secretaría de Cultura Federal.