PERFIL Y NECESIDADES FORMATIVAS DE LOS GESTORES CULTURALES AUTÓNOMOS DE MORELIA

Morelia es conocida por ser una ciudad cultural, habiendo sido incluso nombrada como ciudad con mayor oferta de esta índole después del Distrito Federal por autoridades involucradas en el ámbito. La ciudad es considerada Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1991. Posee además infraestructura para diferentes actividades artísticas y ofrece una gran variedad de eventos. El Sistema de Información Cultural del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) contabiliza oficialmente 12 museos, 9 teatros, 7 centros culturales, 4 galerías, 5 auditorios, 8 bibliotecas, 1 casa de artesanía, 27 festivales, 21 festividades, 1 feria del libro, entre otros. A esto se suma un número importante de espacios y eventos gestionados desde la iniciativa privada y desde la sociedad civil.

A pesar de ello, el ámbito de la cultura y el arte en Morelia está lleno de contradicciones y obstáculos. Existen espacios de formación artística más no de gestión cultural. El presupuesto público asignado al ámbito fluctúa con facilidad; para ello basta con revisar los presupuestos de ingresos y egresos anuales del Municipio y del Estado. Existe además muy poca información académica relacionada al sector y la que se encuentra se enfoca más a las artes, a la preservación del patrimonio y la política cultural. Sobre cómo se administran los recursos, quiénes lo hacen, qué proyectos realizan, es decir sobre gestión cultural, no existe casi nada. ¿Cómo entonces encaminar las acciones? ¿Cómo hacer más eficiente el trabajo?

Buscando aportar al conocimiento de la situación real del sector cultural en Morelia y generar información útil para la toma de decisiones en el mismo, la presente investigación tiene como objetivo principal identificar el perfil del gestor cultural moreliano. Cabe destacar, que se circunscribe al ámbito de la gestión autónoma. En este entendido se define al gestor cultural autónomo como la persona que se desempeña en la gestión, promoción, producción, formación y difusión de actividades, bienes y servicios culturales, artísticos y del patrimonio cultural fuera del ámbito de la administración pública.